Esta sección pretende ser una ventana abierta para compartir y dar a conocer algunas de las reflexiones y construcciones que realizan los niños en clase de Expresión Oral, empleando el formato de carta para dirigirme tanto a los niños como a sus familias.
Esta clase semanal es muy especial para los niños y para mí porque con ella pretendemos desarrollar las Inteligencias Intrapersonal, Interpersonal y Lingüística de cada uno de nosotros.
Esta clase semanal es muy especial para los niños y para mí porque con ella pretendemos desarrollar las Inteligencias Intrapersonal, Interpersonal y Lingüística de cada uno de nosotros.
-H. Gardner recogiendo su premio- |
Pero... ¿qué es esto de las Inteligencias?
La Teoría de las Inteligencias Múltiples fue introducida por H. GARDNER, psicólogo estadounidense, acreedor del Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales de 2011. Esta teoría señala que no existe una inteligencia única en el ser humano, sino una diversidad de inteligencias. Cada persona tiene por lo menos 8 inteligencias o habilidades cognoscitivas. Estas inteligencias trabajan juntas, aunque como entidades semiautónomas. Cada persona desarrolla unas más que otras.
- Inteligencia lingüística. Facilidad para expresarse verbalmente. En los niños y niñas se aprecia en su facilidad para escribir, leer, contar cuentos o hacer crucigramas.
- Inteligencia Lógica-matemática. Es la inteligencia clásica, ser bueno con números y lógica general. Se aprecia en los menores por su interés en patrones de medida, categorías y relaciones. Facilidad para la resolución de problemas aritméticos, juegos de estrategia y experimentos.
- Inteligencia Corporal y Cinética. Facilidad para procesar el conocimiento a través de las sensaciones corporales. Deportistas, bailarines o manualidades como la costura, los trabajos en madera...
- Inteligencia Visual y espacial. Es la que permite ver, sentir y desarrollar el espacio de una manera especial. Los niños y niñas piensan en imágenes y dibujos. Tienen facilidad para resolver rompecabezas, dedican el tiempo libre a dibujar, prefieren juegos constructivos...
- Inteligencia Musical. Son las habilidades musicales, facilidades naturales para sentir, vivir y desarrollar la música. Los menores se manifiestan frecuentemente con canciones y sonidos. Identifican con facilidad los sonidos.
- Inteligencia Interpersonal (inteligencia social). Capacidad que nos permite relacionarnos de mejor manera con el resto de las personas en grupos y en socidad, entendiendo bien los sentimientos de los demás y gestionando constructivamente las emociones personales.
- Inteligencia Intrapersonal. Capacidad de mirar hacia dentro de nosotros mismos, de conocernos y explorar nuestro interior para sacar a relucir lo mejor de nuestra personalidad: reacciones, emociones y vida interior.
- Inteligencia Naturalista. Es la que nos ayuda a comunicarnos con el mundo natural, comprender la naturaleza, observar, sentir con todos los seres y objetos de la naturaleza.
*** Y ahora que ya sabemos de lo que estamos hablando...
... ¡se abre el telón de nuestra clase!
... ¡se abre el telón de nuestra clase!
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Zamora, 16 de octubre de 2.011
Queridos redactores:
¡Qué buen trabajo estáis realizando todos! Se nota que empezáis a ocupar vuestro lugar en una clase de mayores, cada uno en su curso correspondiente. Y estáis comprobando que un grupo sólo puede funcionar correctamente si cada uno de sus miembros ocupa el lugar que le corresponde. De no ser así, el grupo se desequilibra y deja de funcionar. Recordad que TODOS SOMOS IMPORTANTES para tirar del grupo y que UNO SOLO es suficiente para retrasarlo o hundirlo.
En la última clase de expresión oral, después de un mes de clase, todos decíais en voz alta que os sentíais satisfechos, cómodos, a gusto, e incluso realizados en esta clase. Los pequeños valoraban el trabajo en equipo y la ayuda de los mayores y los mayores se han dado cuenta de que los pequeños les están ayudando a mejorar sus textos de una forma muy curiosa, sin pretenderlo, ¿verdad?. También nos dimos cuenta de la necesidad de aprender a hablar muy bajito, para no molestar al grupo mientras trabaja.
Cuando creíamos que la clase se iba a terminar, surgió un tema muy interesante. Uno de vosotros dijo:
- Cuando tú riñes a un niño porque no ha cumplido con su responsabilidad, a mí me parece que me riñes a mí también. Y no me siento bien.
Esta opinión nos llevó a reflexionar sobre la ENERGÍA tan poderosa que tienen NUESTRAS EMOCIONES y que llega a todos los que estamos en clase. Estuvimos contando situaciones en las que nos llegó esa energía, tanto positiva como negativa. Quién no se echa a reír viendo a otros reír aunque no sepa de qué se ríen o, por el contrario, quién no ha compartido lágrimas de otro. Así pudimos llegar a la conclusión de que, en un grupo, TODOS INFLUÍMOS EN TODOS y que, por esta razón, debemos AMIGARNOS A LO POSITIVO, como dice el eslogan de nuestra clase, cumplir con nuestras responsabilidades, intentar regalar caras más sonrientes para aprender de nuestros errores y no tomarse los fallos de los demás como algo personal.
¡Qué lujo de clase, cuánta reflexión y emoción! MUCHAS GRACIAS, CHICOS.
Un beso muy grande,
Manuela
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Zamora, 18 de noviembre de 2011
Queridos redactores:
¡Otro regalo de clase!
El tema de hoy empezó con una palabra que todos habíamos oído alguna vez pero que no sabíamos, exactamente, lo que significaba: FRUSTRACIÓN.
Después de aclarar rápidamente su significado y de repetirla en voz alta varias veces porque se nos trababa la lengua con tantas erres, pudimos recordar situaciones, tanto en casa como en la escuela, en las que nos frustrábamos y nos dimos cuenta de cuáles eran nuestros sentimientos en esos momentos (rabia, enfado, tristeza, desilusión...) y de que, si seguimos respondiendo con frustración cada vez que algo no sale como queremos o esperamos, corremos el riesgo de ver la vida como un auténtico problema, de ser infelices, de quedarnos sin amigos, de no hacer nada por miedo a frustrarnos... de perdernos las cosas buenas de la vida, incluso de enfermar y deprimirnos.
Así que, como ninguno queríamos correr este riesgo, optamos por intentar cambiar nuestras reacciones cuando algo se tuerce, poniendo en práctica nuestro eslogan (Amígate a lo Positivo) y cambiando nuestra mirada. Por ejemplo, cada vez que mi maestra me manda borrar algo que ya he hecho y que me ha costado hacerlo, pero que lo tengo mal, en lugar de pensar que es una faena, podré pensar que es una nueva oportunidad para hacerlo mejor, porque yo me merezco tener un cuaderno que dé gusto verlo y del que sentirme orgulloso. ¡Qué importantes son las oportunidades!
¡Bravo, chicos! Vuestras conclusiones son geniales para todos, porque la FRUSTRACIÓN, nos acaba atrapando a cada uno de nosotros.¡Ánimo y... adelante!
Un beso muy grande,
Manuela
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EL SEMBRADOR DE ESTRELLAS
De día, esta estatua dedicada a Pablo Neruda puede pasar desapercibida.
Es por la noche cuando el título cobra sentido.
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POEMA PARA UNA NUEVA EDUCACIÓN
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Zamora, 19 de enero de 2012
Queridos redactores:
Después de muchos días sin ver el sol, hoy ha brillado con toda su majestuosidad y su energía nos ha llegado, iluminando, una vez más, nuestras cabezas y nuestros corazones.
La clase de Expresión Oral de hoy ha vuelto a ser impresionante. Aprovechando una circunstancia ocurrida en la escuela, hemos reflexionado sobre las diferentes reacciones que tenemos las personas cuando COMETEMOS ERRORES. Habitualmente, nos cuesta mucho enfretarnos a los errores y meteduras de pata. En cambio, se nos da muy bien HUIR o ESCONDERNOS detrás de una mentira o de otra persona más débil a la que acusamos de haber cometido el error nuestro. Todos tuvísteis ejemplos que contar y pudimos comprobar cómo cuando rompí el cepillo de mi abuela, tiré una coca-cola encima de mi primo el día de su Comunión, jugué con los juguetes que mi hermano no me dejaba, me caí y tiré los juguetes de mi hermano, rompí una planta, arranqué flores a mi abuela para hacer potingues con mi prima o puse la calefacción a 30º porque tenía frío y se me olvidó bajarla, el MIEDO a que me echen la bronca, me peguen o me voceen nos impide enfrentarnos a nuestros errores.
También pudimos llegar a la conclusión de que el MIEDO nos paraliza, provoca más problemas, conflictos y tremendas injusticias a otras personas. Y, claro, no lo vamos a permitir porque cada vez que podemos enfrentarnos a nuestros errores, nos damos cuenta de lo bien que nos sentimos y de cómo con este comportamiento, tenemos menos frustración y no escalamos el problema inicial. De esta manera, sin miedo, estamos más relajados, confiamos más en nosotros mismos y sabemos que el error cometido nos va a ayudar a mejorar y a aprender. ¡Qué gusto!
Un beso muy grande,
Manuela
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Queridas familias:
Cuando un niño que comete errores aprende a sentir miedo a las reacciones de los adultos, puede llegar a creer que está indefenso, que no vale para hacer ciertas tareas, que no puede resolver determinadas situaciones, que cualquier cosa que haga es inútil y puede caer en un estado crónico de miedo a actuar (Indefensión Aprendida). Los niños aprenden a ser negativos y se sienten desamparados. Tomemos conciencia de este asunto y transmitamos a nuestros niños OPTIMISMO para que aumente su AUTOCONFIANZA y su AUTOESTIMA.
Si queréis, podéis volver a leer este libro, que me podéis pedir cuando necesitéis, escucharlo en el vídeo o echarle un vistazo a esta clase.
EL ELEFANTE ENCADENADO
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IMAGINA
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Zamora, 25 de febrero de 2012
Queridos redactores:
Últimamente nos estamos dando cuenta y tomamos conciencia de que algunas situaciones que vivimos nos brindan la OPORTUNIDAD de realizar diferentes aprendizajes intrapersonales.
Para unos, el aprendizaje consiste en ESPERAR a que algún compañero pueda resolver sus problemas por su cuenta o pidiendo ayuda a los demás, sin querer intervenir y sin solucionar rápidamente por él. No podemos ni debemos quitar a los demás la ocasión de tomar decisiones, aunque se equivoquen, y enfrentarse a sus miedos y bloqueos. Lo único que podemos hacer, si es que nos importa esa persona, es ofrecer nuestra ayuda y acompañarla por si nos necesita, pero nada más. En algunos casos, ni siquiera conviene ofrecer la ayuda para obligar al otro a que busque soluciones.
Para otros, el aprendizaje consiste en practicar la TOMA DE DECISIONES y PEDIR AYUDA a los compañeros o a la maestra cuando creamos que solos no podemos resolver un problema.
De nuevo, volvemos a plantearnos que cada uno debe ocupar su lugar para que el grupo esté equilibrado y para que cada uno de sus miembros tenga oportunidades de crecer y evolucionar.
¡Cuántos momentos nos regala la vida cotidiana para seguir avanzando como personas! ¡¡¡MUCHAS GRACIAS, VIDA!!!
Un beso muy grande,
Manuela
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Zamora, 2 de marzo de 2012
Queridos redactores:
"LA NUBE NO DESAPARECE, SE CONVIERTE EN LLUVIA"
- Buda-
Con estas palabras comienza el cómic "Arrugas" de Paco Roca (Premio Nacional del Cómic de España en 2008) que hemos leído los mayores de 4º y 6º y yo. Y con ellas hemos empezado nuestra clase de Expresión Oral, hablando de los ABUELOS, del mundo que les rodea, de sus aportaciones, de sus gustos, de sus limitaciones... y subiéndonos a su nube, a ese mundo tan particular en el que continúan su vida. A veces, los adultos andamos enfrascados en nuestra nube y nos olvidamos de que niños y ancianos tienen también la suya propia, tan importante para ellos como para nosotros la nuestra. A veces, esas nubes entran en conflicto y alguien sufre.
¿Qué está pasando en nuestra sociedad para que las diferentes nubes no puedan vivir en armonía? En algunos pueblos indígenas, la figura del anciano es la de máximo respeto y sabiduría. En el mundo occidental, actualmente, el papel de abuelo va a la deriva. Unos ocupan un papel que no les corresponde, el de padres de sus nietos; a otros, la enfermedad les impiden tomar sus propias decisiones y muchos, cuando sienten que no pueden servir a los demás, se abandonan o los abandonan, según los casos. Pero, ¿cuándo van a disfrutar de su ancianidad, cuándo van a pensar en ellos, cuándo van a quererse un poquito y van a valorarse como personas importantes y cuándo van a tomarse ese tiempo que necesitan para hacer balance de su camino de vida y aprendizaje y prepararse para partir y encontrarse con la luz? ¿Cuándo van a vivir esta etapa tan importante? ¿Qué o quién se lo impide?
¿Qué está pasando en nuestra sociedad para que las diferentes nubes no puedan vivir en armonía? En algunos pueblos indígenas, la figura del anciano es la de máximo respeto y sabiduría. En el mundo occidental, actualmente, el papel de abuelo va a la deriva. Unos ocupan un papel que no les corresponde, el de padres de sus nietos; a otros, la enfermedad les impiden tomar sus propias decisiones y muchos, cuando sienten que no pueden servir a los demás, se abandonan o los abandonan, según los casos. Pero, ¿cuándo van a disfrutar de su ancianidad, cuándo van a pensar en ellos, cuándo van a quererse un poquito y van a valorarse como personas importantes y cuándo van a tomarse ese tiempo que necesitan para hacer balance de su camino de vida y aprendizaje y prepararse para partir y encontrarse con la luz? ¿Cuándo van a vivir esta etapa tan importante? ¿Qué o quién se lo impide?
En esta clase, los niños han hecho gala de su sensibilidad y han dirigido su mirada hacia sus queridos abuelos que...
... Nos cuentan historias y cuentan sus vivencias. No se cansan de hablar.
... Hacen comida para toda la familia.
... Protestan.
... Cuidan de nosotros cuando los padres no están.
... Nos enseñan cosas.
... Juegan con nosotros.
... Intentan que seamos creyentes.
... Nos cambian el canal de la tele.
... Ven mucho la tele y escuchan la radio.
... Se chivan de todo a nuestros padres.
... A veces, te consienten todo.
... Te dan todo lo que tienen y pueden.
... Te hacen regalos y te dan la propina.
... Te prestan atención.
... Te regañan y te dan con la zapatilla.
... Te hacen reír.
... Se levantan pronto. Algunos se echan pronto y otros, muy tarde.
... Están todo el día haciendo cosas.
... Dan paseos.
... Les gusta los huertos.
... Tienen que ayudar y opinar en todo.
... Tiene mucha experiencia, arrugas y, algunos, el pelo blanco.
... Pierden rapidez y tienen temblores.
... Montan en bici.
... Casi no tienen dientes y usan gafas.
... La mayoría han visitado el hospital porque han estado enfermos.
... Visitan mucho al médico, aunque no tengan nada porque tiene necesidad de seguir su rutina.
Algunos abuelos, por su deterioro mental, dejan de ser nube para convertirse en lluvia. Siguen siendo ellos, pero han cambiado de estado, como lo hace el agua en la naturaleza. "El yayo... es el yayo", como dice Lili Messina en su libro y que han leído las pequeñas de 1º y 2º. Su ser interno está intacto, sólo cambia su cerebro por causa de la demencia o el Alzeimer. Esos abuelos lluvia continúan su camino de aprendizaje en esas condiciones aunque...
... No se acuerdan de nada.
... Se confunden. No te reconocen como familia.
...Hay que estar pendientes de ellos y no se pueden dejar solos.
... Ven mal.
... Para que te escuchen, les tienes que vocear.
... Para que te escuchen, les tienes que vocear.
... Se sienten abandonados y solos.
... Su cerebro falla. y, a veces, dicen bobadas.
... Casi no hablan.
... No se valen por sí mismos.
... Te quieren contar cosas y no pueden.
Pero siguen ahí, y deberíamos entender su nube y su lluvia y ayudarles a que la vivan porque necesitan vivirla para completar su ciclo.
¡Gracias a todos los abuelos porque, sin ellos, no estaríamos aquí!
¡Chicos, que disfrutéis de vuestros abuelos!
Un beso muy grande,
Manuela
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Zamora, 9 de marzo de 2012
Queridos redactores:
¡Qué buen DEBATE hemos tenido hoy en clase! Desde hace algunas semanas, estamos haciendo un reto espacial en nuestro blog, pero hasta hoy no nos habíamos planteado sus normas aunque las habíamos aceptado anteriormente por unanimidad.
Por un lado, los que han conseguido todos los retos propuestos querían seguir con las normas existentes, argumentando el esfuerzo y el interés que se habían tomado en conseguir esos retos y que todos estaban en igualdad de condiciones para lograrlos.
Por su parte, aquéllos que ya han fallado algún reto, saben que no van a lograr la Gran Recompensa Final aunque acertaran todos los retos que faltan y proponían cambiar las normas, a lo que se negaba el otro grupo.
Todos se dieron cuenta de que hay que plantearse bien los asuntos, de que hay que sopesar los pros y los contras de las situaciones antes de tomar una decisión, de que TENEMOS QUE PENSAR ANTES DE ACTUAR.
A lo largo del debate, algunos reconocieron sus errores y vieron claras las razones que daban los otros. Hubo momentos en los que algunos se esforzaron por cerrar la puerta a la frustración encontrando soluciones positivas. Nos fuimos al recreo con las posturas claras, con los problemas definidos y, a la vuelta, nos quedaba encontrar una fórmula que, sin cambiar las decisiones tomadas con anterioridad, fuera la ocasión para los que queriendo aprender de sus errores tuvieran una nueva oportunidad de conseguir sus objetivos, al tiempo que no perjudicara al grupo que se había esforzado y asegurado de sus respuestas. Queríamos encontrar una fórmula en la que todos ganaran. ¡Y la encontramos!
¡Cómo salían las ideas, qué bien expresadas, con qué claridad y firmeza! ¡Auténticos DELFINES, fuertes y llenos de energía, exponiendo sus ideas y sus emociones sin dañar a nadie, sin peleas, con mucho respeto y aceptando que podemos tener opiniones diferentes y que NO PASA NADA! ¡GENIAL, chicos! Me siento muy orgullosa de vosotros. Muchas gracias por esta clase, todo un derroche de SABER ESTAR y de SABER SER del que yo he podido aprender.
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 17 de marzo de 2012
Queridos redactores:
Ayer viernes vi clarísima la idea sobre la que tantas veces hemos reflexionado, la idea de APRENDER A PEDIR AYUDA. Realmente, estaba preocupada porque pensaba que no podía atender las necesidades y dudas de cada niño y que no podríamos llegar a tiempo de terminar el regalo para los padres. Pero... ¿por qué estaba tan agobiada?, ¿por qué me empeñaba en hacer yo sola el trabajo de atención y solución de dudas y problemas? Sólo tenía que pedir ayuda y..¡ya estaba! Pues no, yo opté por pasarlo mal y sufrir por algo que todavía ni había pasado porque quedaba toda la mañana para rematar el trabajo. Me desequilibré, me descentré, perdí energía y durante un largo rato no disfruté con la actividad. De pronto, los mayores volvieron de la clase de inglés y desbordada por mis emociones, pedí ayuda a los niños. Pedir ayuda no es síntoma de debilidad sino un acto de confianza en los demás y, sobre todo, un acto de humildad. Yo que creo firmemente en el potencial de los niños, en su capacidad de ayuda y entrega, ayer me olvidé de todo eso y quedé a solas con mi ego. Por fortuna, reaccioné a tiempo y, poco a poco, todo empezó a fluir y, no sólo acabamos, sino que nos sobró tiempo para relajar y disfrutar encima de nuestras pelotas, descansar, recuperar energía y preparar nuestras noticias para el blog, sintiéndonos orgullosos del grupo al que pertenecemos.
También pudimos vibrar con frecuencias más altas DANDO LAS GRACIAS a los compañeros de 6º que tanto habían ayudado y dedicándoles un sentido aplauso. ¡Qué importante es DAR LAS GRACIAS y valorar todo lo que tenemos, LO BUENO PORQUE NOS HACE DISFRUTAR Y LO MALO PORQUE NOS HACE APRENDER Y EVOLUCIONAR!
¡Muchas gracias, chicos, porque cada día me enseñáis algo nuevo!
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 30 de marzo de 2012
Queridos redactores:
Una vez más, nos hemos dado cuenta de que cuando tengo un problema, es MI PROBLEMA, independientemente de las circunstancias y de lo mal que lo hagan los demás. Si yo me siento mal, el único responsable de ese sentimiento soy yo, aunque lo que hacemos siempre es intentar buscar otros culpables. En esta búsqueda perdemos demasiada energía y derrochamos demasiado esfuerzo, toda esa energía y ese esfuerzo que necesitaríamos para darle la vuelta a nuestras emociones y reinventarlas. Siempre que tengamos un problema, debo buscar las soluciones DENTRO DE MÍ, que es lo que yo puedo cambiar y lo que está a mi alcance. Sólo tengo que buscarlas y elegir la más adecuada. ¿Cómo? APRENDIENDO A CAMBIAR LA MIRADA, es decir, el enfoque que yo le doy a las cosas. Por difícil que parezca, siempre acabamos encontrando la manera de hacerlo y cuando cambiamos la manera de ver las cosas, las cosas que vemos, cambian. ¡Poderosa herramienta a nuestro alcance y qué poco la empleamos!
¡¡¡QUE PAREN EL MUNDO,
QUE ME QUIERO BAJAAAAAR!!!
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 24 de mayo de 2012
Queridos redactores:
¡Cuántos acontecimientos y emociones hemos vivido desde que escribí la última carta!
Ahora que por fin ya estamos TODOS en clase, hemos podido disfrutar de una sesión de Expresión Oral muy interesante y novedosa. Por primera vez, hemos decidido invitar a las madres a compartir sus pensamientos y emociones con nosotros, trabajando juntos, en un intento de conocernos mejor, de empatizar unos con otros y ayudarnos mutuamente. Hoy se ha sentado con nosotros una madre y hemos lanzado al aire una pregunta para que ella contestara como madre y los niños como hijos:
¿Qué piensas y sientes cuando te enfadas con tu hijo?
¿Qué piensas y sientes cuando te enfadas con tu madre?
La madre aclaró que había dos clases de enfados. Un tipo de enfado vendría cuando el hijo ha faltado a alguno de sus obligaciones o compromisos y él lo sabe. Pero, otras veces, no hay motivos y el hijo recibe igualmente la bronca, sin saber las razones, sólo porque su madre está de mal humor o pasa por un mal momento. Hecha esta importantísima aclaración, pasamos a contestar las preguntas.
La conversación ha sido larga y muy rica en pensamientos y reflexiones, con algunos nervios por vuestra parte, sólo al principio, por lo inusual de la situación.
Después de opinar, de razonar y dar algún que otro ejemplo, todos nos dimos cuenta de que cada vez que un hijo se equivoca con su madre o una madre se equivoca con su hijo, NO SE ACEPTA EL ERROR, no se verbaliza y no se siente, desde el corazón, que hemos hecho algo mal. Chicos, no sóis conscientes y sólo véis lo que hace mal vuestra madre (¡qué pesada!, ¡una bronca más!, ¡vaya rollo que me hayan castigado!, ¡ahora me castigan con lo que más me gusta! o ¡qué tonto soy por dejarme pillar!). ¿Es que cuando hacéis algo mal la responsable es vuestra madre?
La madre, en cambio, cree que, si reconoce su metedura de pata, pierde autoridad, hace el ridículo o se siente más débil ante el hijo. (Lo curioso es que vosotros compartíais este mismo sentimiento).
Madres, ¿es que estamos en una lucha por el poder o lo que nos interesa es pasar mejores momentos con los seres que más queremos, aprendiendo juntos a convivir y creciendo como personas? Los hijos no necesitan madres PERFECTAS ni PODEROSAS, necesitan madres AMOROSAS y el AMOR es justo, equilibra, armoniza, libera, nos hace más grandes y coherentes, aumenta nuestra autoridad y la confianza de nuestro hijo en sus padres.
Después del intercambio de opiniones, llegó el turno de vuestras conclusiones: ¿De qué me he dado cuenta? ¿Qué he aprendido hoy?
... Le importamos mucho a las madres.
... Es mejor hablar que vocear.
... Pedir perdón no es suficiente. Hay que reconocer lo que has hecho mal.
... Las madres pueden aprender de nosotros y nosotros de ellas.
... Cuando nos riñen es por nuestro bien.
... Por pedir perdón no vamos a hacer el ridículo.
... Tengo que admitir los errores y aprender de ellos.
... Soy importante para mi madre.
... Tenemos que respetar a las madres.
¡La experiencia ha sido muy bien valorada por todos los participantes! ¡ENHORABUENA A TODOS!
Chicos, ¡qué buen trabajo de reflexión y empatía!
Madre, ayudaste muchísimo a centrar el tema y tus comentarios permitieron la reflexión de los niños! ¡OLÉ!¡MUCHAS GRACIAS!
La próxima semana continuaremos con la experiencia y contaremos con la presencia de dos madres más.
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 31 de mayo de 2012
Queridos redactores:
Las sensaciones tan agradables que tuvimos la semana pasada con la visita de nuestra invitada de honor en la clase de Expresión Oral, nos animaron a continuar esta semana con la experiencia. Como ya os adelanté, hoy han sido dos las madres que han compartido su tiempo, sus pensamientos y sus emociones con nosotros. Siguiendo la misma dinámica que el otro día, nos hemos planteado un tema de conversación diferente:
¿Cómo te adaptas y vives los cambios de tus hijos?
¿Cómo te sientes ahora que eres un@ chic@ mayor?
En primer lugar, las madres centraron el tema señalando que veían que sus hijos tenían muchas características propias de mayores y se quejaban de que, todavía, conservan rasgos de pequeños, que había diferencias de madurez entre niños y niñas y que los cambios se producían muy deprisa.
Decidisteis que comenzáramos por la primera cuestión planteada. En un plis-plas, las madres hicieron un listado con las COSAS DE MAYORES que observaban en sus hijos y que valoraban como positivas:
... Tienen las ideas muy claras.
... Su forma de pensar ha cambiado mucho y nos ayudan a pensar y a reflexionar.
... Han ganado en responsabilidad y pueden hacer más tareas en casa.
... Su comportamiento cuando están solos es estupendo. Los podemos dejar solos en casa sin que preparen ninguna.
Vosotros compartisteis estas observaciones y añadisteis otros cuantos cambios al listado positivo:
... Han cambiado nuestros juegos.
... Sabemos más cosas.
... Sabemos y podemos abrir la puerta de nuestro pensamiento.
... Sentimos menos rabia y menos frustración. Por eso lloramos menos.
... Pensamos más antes de actuar.
También tocó pasar revista a las COSAS DE PEQUEÑOS que arrastráis:
... Todavía hay rabietas y llantos.
... No acabáis de ser dueños de vuestras tareas.
... Ellas tienen que repetir demasiado las cosas e insistir demasiado en un mismo asunto.
... Delegáis demasiado en ellas para que os hagan tareas que os corresponden a vosotros.
Este último comentario nos hizo plantear cómo nos sentimos cuando nuestra madre OCUPA NUESTRO LUGAR haciendo lo que nos correspondería hacer a nosotros. Después de poner ejemplos personales y de sospesar las ventajas y los inconvenientes que nos trae esta situación, TODOS os disteis cuenta de que os INTERESA OCUPAR VUESTRO LUGAR COMO HIJOS porque, aunque a veces sea molesto o fastidie...
... Nos evitamos problemas y broncas. Ganamos en tranquilidad.
... Sentimos satisfacción y tranquilidad por hacer lo que debemos.
... Aprendemos y nos hacemos responsables.
... Podemos tachar la lista de las cosas de pequeños y nos convertimos en mayores.
... Organizáis mejor vuestras cosas y sabéis dónde las tenéis.
... Ganáis la confianza de vuestros padres.
... Podéis disfrutar de mayor libertad y os dejan hacer más cosas.
... Tenemos más tiempo para jugar y hacer otras cosas.
... Tenemos más tiempo para estar con los amigos.
... Podemos ir a más sitios.
¡¡¡BRAVO, CHICOS!!!
Las madres también fueron conscientes de las emociones negativas que las invadían cuando se veían en la obligación de hacer vuestras tareas.También ellas se dieron cuenta de que no les interesaba seguir ocupando un lugar que no es el suyo porque necesitaban alejar la rabia y sentir satisfacción, alegría y bienestar. De esta manera, además, podrían ayudaros a vosotros.
¡GENIAL! ¡MUCHAS GRACIAS, MADRES! Habéis colocado muy bien el tema.
...¿Merece la pena intentarlo por vosotros y por ellas?
Una vez más, se trata de cambiar la mirada y amigarse a lo positivo.Y esto... ¡LO BORDÁIS!
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 8 de junio de 2012
Queridos redactores:
La última sesión con madres, según me habéis dicho, os ha resultado un poco más complicada por el tema que hemos tratado.Y... no me extraña que hayáis tenido dificultades porque el tema se las traía. De todas formas, vuestras opiniones y reflexiones han vuelto a ser geniales.
Las madres apuntan que sus miedos principales se producen cuando sienten que no pueden ejercer control sobre una situación, tanto en casos de enfermedad como cuando ellas no están cerca de sus hijos para vigilarlos y atenderlos.
Por otro lado, la mayoría de vosotros tenéis miedo a las broncas y a que os castiguen con las cosas que más os gustan, aunque reconocéis que son muy poco intensos y que no suponen ningún problema. Otros, los mayores, señaláis que tenéis miedo a que los padres os pongan muchos límites y os controlen demasiado. Y sólo algunos tenéis miedo a que vuestros padres descubran vuestros secretos y os obliguen a ir a sitios que no os gustan.
Todos os disteis cuenta de que los miedos de las madres eran muy grandes y, la mayoría, nunca os lo habíais planteado. Pero con vuestra capacidad de empatía pudisteis hacerlo.
El paso siguiente fue pensar si nos interesaba seguir sufriendo estos miedos. La respuesta, por parte de todos, fue unánime. ¡A NADIE LE INTERESABA! Así que... ¡manos a la obra! ¿Qué podemos hacer para evitar o reducir estos miedos?
... Pensar antes de actuar para evitar comportamientos inadecuados.
... Hablar con los padres y admitir errores.
... No ir a sitios peligrosos.
... Cambiar la mirada y el pensamiento sobre una situación.
En resumen... ¡QUERIENDO CAMBIAR LAS COSAS! Una vez más, aparece el PODER DE LA INTENCIÓN.
Por su parte, a ellas también les interesaba evitar o reducir sus miedos. Se propusieron cambiar su mirada y pensar menos en negativo cuando los hijos salgan de casa. Sin embargo, también necesitan vuestra ayuda para reducir sus miedos. Las madres aseguraron que si ellas ven que sois responsables en el estudio, sois responsables a la hora de elegir amigos y vuestro comportamiento, tanto en casa como en la calle, es adecuado y respetuoso... tendrían más confianza en vosotros, os irían dando más libertad, ganarían en tranquilidad y, por supuesto, tendrían muchísimos menos miedos. ¿Nunca habíais escuchado esto de boca de las madres? Pues...¡menudo reto interesante que os han lanzado! ¿Quién quiere atreverse con él? ¡Creo que la recompensa merece la pena!
La última sesión con madres, según me habéis dicho, os ha resultado un poco más complicada por el tema que hemos tratado.Y... no me extraña que hayáis tenido dificultades porque el tema se las traía. De todas formas, vuestras opiniones y reflexiones han vuelto a ser geniales.
¿Cuáles son tus miedos como madre?
¿Cuáles son tus miedos como hij@?
Las madres apuntan que sus miedos principales se producen cuando sienten que no pueden ejercer control sobre una situación, tanto en casos de enfermedad como cuando ellas no están cerca de sus hijos para vigilarlos y atenderlos.
Por otro lado, la mayoría de vosotros tenéis miedo a las broncas y a que os castiguen con las cosas que más os gustan, aunque reconocéis que son muy poco intensos y que no suponen ningún problema. Otros, los mayores, señaláis que tenéis miedo a que los padres os pongan muchos límites y os controlen demasiado. Y sólo algunos tenéis miedo a que vuestros padres descubran vuestros secretos y os obliguen a ir a sitios que no os gustan.
Todos os disteis cuenta de que los miedos de las madres eran muy grandes y, la mayoría, nunca os lo habíais planteado. Pero con vuestra capacidad de empatía pudisteis hacerlo.
El paso siguiente fue pensar si nos interesaba seguir sufriendo estos miedos. La respuesta, por parte de todos, fue unánime. ¡A NADIE LE INTERESABA! Así que... ¡manos a la obra! ¿Qué podemos hacer para evitar o reducir estos miedos?
... Pensar antes de actuar para evitar comportamientos inadecuados.
... Hablar con los padres y admitir errores.
... No ir a sitios peligrosos.
... Cambiar la mirada y el pensamiento sobre una situación.
En resumen... ¡QUERIENDO CAMBIAR LAS COSAS! Una vez más, aparece el PODER DE LA INTENCIÓN.
Por su parte, a ellas también les interesaba evitar o reducir sus miedos. Se propusieron cambiar su mirada y pensar menos en negativo cuando los hijos salgan de casa. Sin embargo, también necesitan vuestra ayuda para reducir sus miedos. Las madres aseguraron que si ellas ven que sois responsables en el estudio, sois responsables a la hora de elegir amigos y vuestro comportamiento, tanto en casa como en la calle, es adecuado y respetuoso... tendrían más confianza en vosotros, os irían dando más libertad, ganarían en tranquilidad y, por supuesto, tendrían muchísimos menos miedos. ¿Nunca habíais escuchado esto de boca de las madres? Pues...¡menudo reto interesante que os han lanzado! ¿Quién quiere atreverse con él? ¡Creo que la recompensa merece la pena!
¡¡¡ENFRÉNTATE A TUS MIEDOS!!!
¡¡¡PLÁNTALES CARA!!!
Al final, pensasteis que...
... las madres tienen muchos miedos y muy fuertes,
... todos tenemos miedos,
... las madres se preocupan por tí más de lo que pensamos,
... se vive mejor como hijo que como madre,
... los hijos podemos ayudar a nuestras madres a reducir sus miedos.
¡Menudas reflexiones de hijos y de madres! ¡ENHORABUENA A TODOS! ¡Qué orgullosa me siento de esta Comunidad! ¡Muchas gracias!
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 14 de junio de 2012
Queridos redactores:
La última clase de Expresión Oral de este curso nos ha traído uno de los temas más importantes de la vida: LOS AMIGOS. ¡Y qué claro lo teníais! Rápidamente, señalasteis que los AMIGOS...
...comparten pensamientos y sentimientos,
... se divierten,
... se aconsejan,
... consuelan,
... animan,
... juegan,
... se apoyan,
... se quieren,
... se perdonan,
... confían,
... respetan,
... se aceptan,
... se ayudan para que nos demos cuenta de nuestros errores...
Pero... ¿qué debemos tener en cuenta para elegir con éxito a un amigo?
La respuesta, que fue saliendo poco a poco, en el transcurso de la conversación, nos dejó una reflexión muy interesante. La edad es un factor que tenéis en cuenta pero, especialmente, elegís como amigos a las personas que tienen una mentalidad similar a la vuestra y con las que conectáis bien, que piensan de la misma manera, que quieren hacer las mismas cosas y tienen la misma libertad que vosotros.
Si no seguís estos criterios, surgen los enfados, las discusiones, los insultos y las peleas, dejáis de divertiros y perdéis el tiempo.
¡Lo tenéis clarísimo! Pero...el tema no se acabó aquí. Además, habéis reconocido la diferencia entre COMPAÑEROS de clase o de juegos y AMIGOS. Por un lado, veis que la diversidad de edades, mentalidades o personalidades enriquece el trabajo de clase o los juegos. Sin embargo, esa misma diversidad sólo os trae problemas en vuestras relaciones de amigos. Por tanto...¡cada cosa en su sitio y cada persona en su lugar!
¡Bravo, chicos!¡Qué buen trabajo!
Un abrazo,
Manuela
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Zamora, 20 de junio de 2012
Queridos redactores:
A tan sólo dos días de final de curso, quiero dirigirme a vosotros para felicitaros por vuestros aprendizajes y desearos unas maravillosas vacaciones de verano que os carguen de energía.
También quiero cerrar esta sección de Cartas de una Tutora, compartiendo con todos el mensaje que he escrito a l@s chic@s de 6º para acompañaros en este paso tan importante de vuestras vidas: vuestra salida de la escuela para ingresar en el instituto.
Llega el momento de las despedidas. Dices adiós a tu escuela, a tus compañeros y a tus
maestros. Atrás quedan experiencias y vivencias inolvidables que llevarás
siempre contigo.
Al mismo tiempo, llega el momento de un nuevo reto personal y social. La entrada en
el Instituto te abre un gran surtido de novedades: nuevo lugar, nuevos
compañeros y profesores, nuevos aprendizajes… Pero no vas sola. Vas acompañada
por el mejor de los compañeros, ese compañero que nunca te fallará porque,
incluso cuando te equivoques, te va a permitir aprender de tus propios errores,
ése que te va a ayudar a tomar decisiones, ése que te aconsejará a la hora de
solucionar problemas y en los momentos difíciles, ése que te ayudará a convivir
en tu nuevo centro de estudios, ése que dejará que los demás tengan una imagen
positiva de ti, ése que te animará a que defiendas tus intereses sin herir a
los demás, ése que te ayudará a cambiar la mirada y a AMIGARTE a lo POSITIVO...
¿Sabes
ya de qué te estoy hablando? ¡Pues claro que sí!
Se
trata de tu poderoso ordenador personal, se trata de…
…TU PENSAMIENTO
En el Instituto tendrás que seguir
mimándolo, cuidándolo, poniéndolo en funcionamiento cada día… para que no se te
apague, para que no permitas que
cualquiera te lo pueda apagar y para
que puedas ofrecer, a ti mismo y a los demás, lo mejor que llevas dentro. ¡Tú lo
mereces!
Aprovecha el verano. Diviértete todo lo que puedas, disfruta
con tu familia y tus amigos, sueña
mucho, mucho y cárgate de energía
para el gran estreno de septiembre en el Instituto. ¡Ánimo y… adelante!
Desde aquí, te seguiremos apoyando y recordando
con mucho cariño.
Un abrazo,
Manuela